Bio-Field y el Aura
Bio-Field y el Aura
Extracto de “La Personalidad Primaria y su Relación con las Transmisiones”. Gerda Boyesen, 1985. (Bio- Field y el Aura)
“También son evidentes más cualidades “espirituales”.
Esto proviene de estar en contacto con el yo instintivo y el inconsciente; el lado primitivo y los impulsos animales.
Este contacto trasciende al yo y a la persona hacia el Ser Superior y el lado espiritual.
Ambos se complementan y crean un equilibrio.
La Personalidad Primaria está “abierta” sexualmente; no sólo al lado físico sino también a una sexualidad más transpersonal o trascendente: la tántrica.
El corazón también está “abierto” y no “cerrado”.
Esta persona puede amar. Es una condición necesaria, pero no suficiente.
La apertura del tercer ojo trae una dimensión psíquica de intuición y contacto con el Ser Superior y, por tanto, con el lado espiritual de la humanidad.
Entramos en contacto y somos motivados por las “cualidades de la eternidad”: belleza, compasión, gracia, nobleza y pasión.
Las “corrientes” de bioenergía que fluyen a través del cuerpo ahora pueden salir al exterior, y con ellas se va nuestra conciencia.
Comenzamos a interactuar con algo más grande que nosotros mismos.
Nuestras sensaciones se extienden más allá de nuestros cuerpos físicos; nuestras percepciones se extienden más allá de los límites de la mente.
En un nivel más amplio, existe una sensación de ser uno con el universo y no solo un individuo aislado”.
Gerda Boyesen
Bio-Field y el Aura
El “ Bio- Field” es el campo electromagnético dentro y alrededor de los organismos vivos.
El “aura” es el nombre que se da a las emanaciones de bioenergía (medibles, por ejemplo, mediante la fotografía Kirlian) que emergen de los centros de energía del cuerpo, a lo largo, más allá de las “salidas” (cabeza, manos y pies) y a través de la piel, cuando estamos relajados y libres de estrés.
Los métodos biodinámicos incluyen el trabajo con el biocampo y el aura, y con los métodos clínicos del trabajo e investigación “orgonomía” del Dr. Wilhelm Reich, cuyo único propósito es liberar la energía “orgónica” de la represión psicológica.
Los métodos biodinámicos incluyen ejercicios de respiración abdominal y de “medusa”, que actúan para estimular las corrientes de plasma dentro de la musculatura más profunda.
A menudo, durante o después de un tratamiento biodinámico podemos estar en un estado de relajación profunda y natural.
A medida que se restablece la pulsación, la membrana celular se vuelve permeable y puede irradiar una frecuencia o vibración fuerte y clara que a menudo se experimenta y se puede medir como una corriente vibrante o salud.
Esto puede ser experimentado o reconocido por otro como “carisma”, “atracción” o “presencia”.
A medida que nos liberamos del estrés, podemos tomar conciencia del campo energético humano y del aura y del biocampo que rodea a todos los seres vivos y las cosas: personales y transpersonales, microcosmos y macrocosmos.
La naturaleza esotérica de la experiencia biodinámica rara vez se comunica de una manera que describa completamente su simplicidad, profundidad y magnitud.
La base molecular de la comunicación entre células es la base de una verdadera relación. Esta interacción se experimenta a nivel físico, energético, emocional y espiritual.
A medida que la bioenergía se libera en una persona, podemos tener una sensación de despertar y sentirnos más vivos. Retomamos la consciencia, incluyendo el sexto sentido de la intuición.
A medida que la membrana celular se vuelve permeable a un nivel micro, la bioenergía puede pasar a través de ella y más allá, hacia el biocampo.
El Dr. Wilhelm Reich MD habló sobre el concepto de “ Superposición Cósmica ” para describir la importancia de la pulsación simultánea en el nivel macro, desde el núcleo a la periferia, desde lo personal a lo universal y desde el individuo a la comunidad o sociedad.
A medida que la bioenergía penetra la membrana celular, también alcanza y abastece la periferia de todo el cuerpo físico y energético y el campo que se encuentra más allá.
Inicia un proceso sensorial que genera consciencia, consciencia y un sentimiento de conexión, pertenencia y amor. Es nutritivo, enriquecedor, enriquecedor y transformador.
Esto puede producir sensaciones de felicidad y éxtasis a medida que se restablece la circulación completa de energía dentro y alrededor del cuerpo.
Éste es nuestro derecho de nacimiento y nuestra verdadera naturaleza adulta.